martes, 26 de marzo de 2019

Pensando en voz alta....


Vivimos en un tiempo en el que la información abunda y en algunos casos infoxica, por lo que es necesario desarrollar habilidades para seleccionar aquella que es más adecuada a nuestras necesidades y mantenernos actualizados participando de las redes que tejemos. Así el aprendizaje conectivo lo logramos a través de las redes de conocimiento que establecemos y alimentamos con nodos especializados y conectados, en los que la diversidad de opiniones generadas por la apertura a otras/nuevas miradas en las que la interactividad permite espacios de reflexión, de curaduría, de alimentación, dando como resultado un aprendizaje interconectado para toda la vida y durante toda la vida.
Somos el resultado de la interacción y participación. Por nombrar algunos espacios que creamos con los alumnos, por ejemplo, grupos en Facebook para alimentar los contenidos impartidos en las clases; utilizamos los hashtag de Twitter para que realicen actividades académicas o conectarse con otros expertos; Edmodo como red de aprendizaje al igual que Moodle, donde se cuelgan las clases, solicitan los trabajos prácticos o se realizan test o encuestas; grupos de comunicación instantánea, activa y participativa en WhatsApp; GoogleDrive para elaborar proyectos en conjunto, sean presentaciones, documentos de textos, formularios de encuestas o estadísticas; la transmisión en directo de eventos, como cuando participamos en Edufest, a través de Facebook; la utilización de la red social Youtube en el canal de Bibliotecno, donde compartimos los contenidos que generamos para las clases. Sumo a ello el uso de Scoop.it que a través de la curaduría de contenidos estaremos al corriente de la última información, siguiendo a un experto o especialista; Pinterest donde subimos y etiquetamos imágenes para compartir en red, Mendeley o Diigo con grupos para compartir bibliografías o webgrafías y favoritos… etc. etc.
Como se aprecia, el ciberespacio permite el desarrollo de la inteligencia colectiva, de redes sociales digitales que incentivan a conectarnos unos con otros en forma instantánea y a procurar nuevas y mejores maneras de impulsar el aprendizaje conectivo a través de las tecnologías disponibles. De esa manera la interacción es lo que nos mantiene vivos, activos, actualizados tanto en el ámbito profesional como educativo, social o cultural. Creo que estar conectados no es una elección, es una necesidad.

lunes, 25 de marzo de 2019

Propedeútico 2019

Los invitamos a leer este texto que trabajaremos en el encuentro de hoy, donde pensaremos juntos las habilidades que deben reunir los profesionales de la información en estos tiempos de tanta tecnología.

Las habilidades que los bibliotecarios deben tener en el 2020 / Julián Marquina.
Habilidades de los bibliotecarios para el 2020

jueves, 21 de marzo de 2019

Mi PLE

PLE (Personal Learning Environments) “…es el conjunto de herramientas, fuentes de información, conexiones y actividades que cada persona utiliza de forma asidua para aprender” (Adell y Castañeda). En este marco podemos decir que es ese conjunto de contextos que nos proporcionan diferentes oportunidades para aprender. Es la puerta de entrada a la información, al conocimiento, al aprendizaje y comunicación. Al momento de construir mi PLE me di cuenta de la cantidad de aplicaciones que utilizo para buscar, adquirir, gestionar, utilizar, administrar, crear, difundir y comunicar la información que necesito para mi desarrollo personal y profesional. A su vez pensé cómo fui construyendo mi red de comunicación y aprendizaje, participando activamente en varias redes sociales, profesionales, de ocio, etc. Esta imagen es el resultado de mi PLE.

Los invitamos a sumarse a la propuesta